24.10.07

¡Oh Cristo!, Amado Nervo

Ya no hay un dolor humano que no sea mi dolor;
ya ningunos ojos lloran, ya ningún alma se angustia
sin que yo me angustie y llore;
ya mi corazón es lámpara fiel de todas las vigilias,
¡oh Cristo!

En vano busco en los hondos escondrijos de mi ser
para encontrar algún odio: nadie puede herirme ya
sino de piedad y amor. Todos son yo, yo soy todos,
¡oh Cristo!

¡Qué importan males o bienes! Para mí todos son bienes.
El rosal no tiene espinas: para mí sólo da rosas.
¿Rosas de Pasión? ¡Qué importa! Rosas de celeste esencia,
purpúreas como la sangre que vertiste por nosotros,
¡oh Cristo!

Amado Nervo

2 comentarios:

Verbo... dijo...

Amado Nervo

Al escribir estas palabras estuvo altamente identificado con Cristo,
transmutante en Cristo, o mas bien como dijo Pablo:

Ya no vivo Yo, Vive Cristo en mi.

El dia en que Yo pueda decir con certeza esas palabras, creo que me estaria confirmando en su servidora.

Un abrazo hermano en Cristo Jesus,

M.

Verbo... dijo...

saludos.